San Miguel Arcángel y la Esclavitud del Santísimo de
Cádiz
La Venerable
e Inmemorial Esclavitud del Santísimo Sacramento y Archicofradía de las
Benditas Ánimas del Purgatorio, establecida canónicamente en la parroquia de
San Antonio de Cádiz, tiene por patrono a San Miguel Arcángel. Su festividad se
celebra el 29 de septiembre y ese día la Esclavitud celebra culto eucarístico
en su honor. La figura de San Miguel está muy relacionada con las Ánimas del
Purgatorio por su función de psicopompo, de conductor de almas, ya que con la
balanza decidirá el destino de cada una de ellas. La balanza, símbolo universal
de equidad y justicia, es uno de los atributos propios de San Miguel junto con
la espada. Ambos objetos los porta la imagen de San Miguel de la parroquia de
San Lorenzo, atribuida al escultor José Montes de Oca, que se encuentra en el
retablo propiedad de la Esclavitud del Santísimo.1 Tras edificarse
la iglesia de San Lorenzo, en esos momentos ayuda de parroquia, el obispo
Lorenzo Armengual de la Mota, como patrono y fundador de dicho templo, donó a
la Esclavitud del Santísimo capilla con bóveda de enterramiento en el colateral
del lado del Evangelio.2 Antes de proceder a la firma de la
escritura de donación, se trató el asunto en el Cabildo General celebrado por
la Esclavitud el 23 de febrero de 1727, donde se expuso la propuesta de
donación de la capilla, consecuencia de la gratitud del obispo Armengual por
haber recibido de la Esclavitud una asignación anual de seis mil reales de
vellón para la fábrica de la iglesia de San Lorenzo, empresa en la que no
participó ninguna otra hermandad o cofradía de la ciudad. Conocidos todos los
detalles que figuraban en la donación, se aprobó por unanimidad de todos los presentes.3

San Miguel. Parroquia de San Lorenzo
En la
escritura de donación fechada el 7 de junio de 1727 también se deja constancia
de la contribución que hace la Esclavitud para la fábrica de San Lorenzo y se
refleja la donación en estos términos: «…continuando
nuestro deseo en perfeccionarla y que se mantenga con el adorno y veneración
que corresponde al Divino culto, determinamos conferir la propiedad perpetua y
libre uso del arrimo de la capilla colateral diaconal de su crucero a la Venerable
Esclavitud del Santísimo Sacramento y Hermandad de las Benditas Ánimas, que en
unión son sitas en nuestra Santa Catedral y sus ayudas de Parroquia, para que
en él erigiesen altar y retablo que sirviese de Sagrario, en el que colocasen
sus imágenes, e hiciesen en su frente bóveda para enterrar sus hermanos y
esclavos a su arbitrio...».4 La escritura de donación fue otorgada
ante el escribano público Manuel de Mesa, quien también pertenecía a la
Esclavitud y era su secretario, como así consta en uno de los libros de
hermanos y esclavos.5
Aunque
el origen de la Esclavitud está en la parroquia de Santa Cruz al menos desde el
siglo XVI y contando en el siglo XVIII con capilla propia en San Lorenzo, posteriormente
se estableció definitivamente en la iglesia de San Antonio. Sabemos por uno de
los libros que se conservan en su archivo que en 1723, y probablemente desde
antes, se reunían para sus Cabildos en la iglesia de San Antonio.6
Esta perdurable estancia de la Esclavitud en dicha iglesia, aunque sin un sitio
propio, hizo que se encontrara en una situación idónea para recibir la
propuesta que le llevó a su instalación definitiva.
Cuando
la Hermandad del Patrocinio terminó de labrar sus dependencias, se encontraba
concluido el patio por uno de sus lados, pero inacabado por el otro. La fábrica
de la iglesia, al no tener fondos para realizarlo, le ofreció a la Esclavitud
donación de sitio y que se encargara de la edificación, asunto que fue aprobado
por la Esclavitud en Cabildo General de 29 de junio de 1760. Así, el 11 de
septiembre de 1760, se otorga escritura de «donación
de sitio por la fábrica de la iglesia auxiliar del Señor San
Antonio de esta ciudad a la Esclavitud del Santísimo Sacramento y Archicofradía
de las Ánimas».7 Todo lo que le pertenece desde esos momentos
queda especificado en el capítulo diecisiete de los estatutos de la Esclavitud;
«En la parroquia de San Antonio, además
de la Sala de Juntas, con el departamento de Mayordomía y Secretaría y el
almacén en la planta baja, es propiedad de la Esclavitud el archivo, cuarto de
aguamanil, escaleras que conducen a la sala y la Capilla de Nuestra Señora del
Carmen, los que han sido cedidos en usufructo por convenio entre el señor Cura
de la parroquia y la Venerable Esclavitud».8
No
obstante, se mantenía la unión con la parroquia de San Lorenzo ya que en el
capítulo catorce de los estatutos se dispone que «se celebrará el día del Señor San Miguel, protector de esta cofradía, o
el domingo inmediato en la Parroquia de San Lorenzo donde se halla su imagen,
una misa cantada debiendo asistir a estos actos toda la Venerable Esclavitud».
En este mismo capítulo se hace referencia a las celebraciones del Corpus, en
concreto como «el Domingo infraoctava al
Corpus, se ha de celebrar la fiesta del Santísimo Sacramento, estando su Divina
Majestad de manifiesto en la iglesia de San Antonio. Por la tarde procesión por
las calles con su Divina Majestad y el Arcángel San Miguel».9
Varias crónicas del último cuarto del siglo XIX relatan cómo en la procesión,
conocida popularmente como el Corpus Chiquito, participaba la imagen de San
Miguel llevada en andas. Al terminar la procesión y reservar al Santísimo, se
llevaba de vuelta al arcángel hasta la parroquia de San Lorenzo, acompañado de
las hermandades establecidas es su collación e integrantes de la procesión y
acompañamiento musical.10 En alguna ocasión, también participó en el
cortejo la Inmaculada que se encontraba en el retablo de la Esclavitud de la
parroquia de San Lorenzo, pero lo más curioso es que a principios del siglo
XIX, salían en la procesión todas las imágenes de ese retablo; San Miguel
Arcángel, la Inmaculada, San Antonio y San José.11
Actualmente,
es en la parroquia de San Antonio donde la Esclavitud del Santísimo celebra
todos sus cultos; Jueves y Viernes Eucarísticos, Procesión Pascual el quinto
domingo de Pascua, Triduo Eucarístico en junio, Cultos a San Miguel Arcángel en
septiembre, Quinario de Ánimas en noviembre y Triduo a la Inmaculada Concepción,
patrona de la Esclavitud, en diciembre. La Esclavitud conserva un importante
patrimonio, tanto documental como artístico. Relacionado con el San Miguel de
la parroquia de San Lorenzo se guarda un juego de alas, diadema, espada y
balanza, junto con tres trajes; de tisú de plata con hilos de oro, de seda
dorada con hilos de plata y por último uno celeste para la festividad de la
Inmaculada. Otra escultura de San Miguel de pequeño tamaño se custodia en
dependencias interiores y
es la que se coloca en el altar de cultos en septiembre por su festividad. Está
representado con espada y escudo donde aparecen las letras Q.S.D. iniciales de Quis sicut Deus (Quien como Dios), en la
lucha contra el demonio que se encuentra a sus pies.

San Miguel. Parroquia de San Antonio
En
esta ocasión, del archivo histórico de la Esclavitud, vamos a destacar un libro
manuscrito del siglo XVIII cuyo interés se ve incrementado por la magnífica estampa
calcográfica de San Miguel Arcángel que conserva en su interior. El volumen,
que se titula Libro donde se apuntan las
misas que la Archicofradía de las Benditas Ánimas celebra anualmente en su
aniversario, nos habla de la necesidad de realizar sufragios por las almas
que están en el purgatorio.12
Se
considera al purgatorio como un lugar intermedio en el que se ha de seguir
penando para adquirir el estado de gracia necesario para morar en el cielo. El
tiempo en que el alma está en este lugar no es medible, pero sí puede
abreviarse gracias a los sufragios realizados por los vivos, especialmente las
misas.13 Para asegurar la salvación, en los testamentos se dejaba
reflejado el número de misas y el lugar para celebrarlas en sufragio por el
alma. Aunque en la primera mitad del siglo XVIII la preferencia de los
testadores era la celebración de las misas en conventos, entre las iglesias, la
de San Antonio era la preferida.14 Además de las misas que cada
persona dejaba establecida en su testamento para la salvación de su alma, la
Iglesia estableció una celebración anual, el 2 de noviembre, en conmemoración
de todos los fieles difuntos. Durante el mes de noviembre, la Esclavitud
celebra un quinario por las Benditas Ánimas del Purgatorio.
El
libro que estudiamos tiene un formato en cuarto mayor y encuadernación en piel,
decorado con rueda en dorado con motivos florales y palmas en las esquinas. La
parte central presenta un florón en dorado. Esta ornamentación, al igual que las
guardas que conserva de papel pintado al agua decoradas con la técnica de
peines, es muy característica
del siglo XVIII. Está fechado en la portada en el año 1784 y en las páginas
interiores se anotan los nombres de los hermanos y el número de misas asignadas
a cada uno, detallando a continuación la limosna por misa, generalmente de 5
reales de vellón. Las anotaciones son anuales, apareciendo años consecutivos
hasta 1789. La estampa de San Miguel Arcángel se encuentra en la portada, sobre
el título manuscrito del libro. En la parte inferior de la estampa, aparece la
autoría de la misma; Klauber Cath. Sc. et
exc. A. V.
Klauber es el apellido de los autores del
grabado, los hermanos Joseph Sebastian (c.1700-1768) y Johann Baptist
(1712-c.1787), miembros de una estirpe de grabadores y editores alemanes. En
algunas estampas aparecen las abreviaturas de los nombres de los dos
grabadores, pero en la mayoría, como en este caso, sólo el apellido Klauber. Eran
naturales de Augsburgo, ciudad donde abrieron su taller hacia 1740; Fratres Klauber Catholici. Su empresa
era específicamente católica, de ahí la abreviatura Cath. de catholici
(católicos), para diferenciarse de todas las demás editoriales protestantes de
la ciudad.15 Las abreviaturas Sc.
et exc. se refieren a la técnica del grabado, sculpsit (tallado) al aguafuerte, con buril, o combinando ambas
técnicas sobre una plancha de cobre, y excudit
(impreso) ya que además de realizar el grabado ellos mismos lo imprimen. Las
iniciales A.V. son de Augustae Vindelicorum, nombre latino de
Augsburgo, lugar donde realizan sus trabajos.
Publicaron
multitud de estampas devocionales, de santos, apostolados, grabados bíblicos
como los realizados para la obra Historiae
Biblicae Veteris et Novi Testamenti, estampas de la Virgen para la obra Letanía lauretana de la Virgen Santísima,
o la serie de estampas sobre la oración del padrenuestro. En sus composiciones
domina la estética rococó, adornada con múltiples y minuciosos detalles con un
gran contenido teológico. Las cartelas e inscripciones se reparten en el
dibujo, dando contenido a la escena o personaje representado, entre paisajes y
elementos arquitectónicos en los fondos.16 Todos estos grabados
tuvieron una amplia difusión en Europa y América y sirvieron como fuente de
inspiración a los pintores. Uno de los ejemplos más claros de esta difusión e
influencia es un apostolado grabado por los Klauber, que sirvió de modelo al
apostolado que pintó Bernardo Rodríguez en Quito.17
La
estampa que analizamos está pegada sobre la portada del libro, con unas medidas
de 175x130 mm. Podríamos encuadrarla en el tercer cuarto del siglo XVIII. Con
la rocalla como marco habitual en sus grabados, destaca en el centro la figura
de San Miguel de medio cuerpo, alado, con casco y armadura, como jefe de las milicias
angélicas, con la espada flamígera en su mano derecha derrotando al demonio y
el escudo a su izquierda, donde podemos leer Quis ut Deus (Quién como Dios) que es la traducción de su nombre
hebreo. En la parte inferior, a la izquierda, un demonio vencido y en el lado derecho
dos personajes asustados y ensimismados por el poder divino, personificado en
San Miguel. Uno de ellos mantiene un libro abierto donde se puede leer Sicut in coelo et in terra (Como en el
cielo y en la tierra). Su indumentaria nos recuerda la vestimenta de un clérigo
protestante, principalmente por las bandas blancas por encima de la sotana. Puede
hacer referencia a que, tras el Concilio de Trento, el triunfo del
arcángel sobre el demonio se asoció con el triunfo de la Iglesia Católica
frente a la Reforma Protestante. En la parte superior, representando el cielo,
de ambos lados caen rayos zigzagueantes. Uno de los rayos parte de una
construcción arquitectónica que podemos asociarla con la divinidad, ya que este
tipo de rayos es empleado por los Klauber en otro grabado de San Miguel, perteneciente
a una serie de catorce estampas de las Jerarquías Angélicas, donde los rayos
parten del ojo divino, inserto en un triángulo, que se encuentra como emblema
en el escudo del arcángel.
En sus
estampas, los autores suelen disponer el nombre del santo representado y
leyendas alusivas. En este caso, en la parte superior aparece, Ecce Spiritus grandis et fortis. 3 Reg. 19
(He aquí el espíritu grande y poderoso), frase sacada del Antiguo Testamento,
del tercer Libro de los Reyes, capítulo 19, versículo 11, de la Biblia Vulgata que,
aunque en origen está en otro contexto, se le ha aplicado al arcángel. Y en la
cartela inferior, incide en esto mismo, ofreciendo el nombre del representado, S. Arch-angelus Michael Fortisimus Spirituum
(San Miguel Arcángel, el más fuerte de los espíritus). Esta exaltación de la
figura de San Miguel es comprensible ya que el arcángel tiene un lugar
predominante en la Iglesia Católica; encargado de pesar las almas en el Juicio
Final, jefe de las milicias celestiales, vencedor de Lucifer y protector de la
Iglesia Universal.
Los
siglos de existencia de la Esclavitud del Santísimo Sacramento y Archicofradía
de las Benditas Ánimas del Purgatorio, han legado un importante archivo aún por
descubrir. En estos archivos históricos, además de la interesantísima e inédita
información que aportan, en ocasiones podemos encontrar en el interior de los
libros un elemento añadido que en su día consideraron oportuno incorporar al
documento, como ha ocurrido en este caso con el grabado de San Miguel Arcángel.
Agradezco a la Esclavitud del Santísimo y especialmente a su Hermano Mayor,
Ramón Caño Señoranes, la oportunidad y facilidades prestadas para la
realización de este artículo.
José María Collantes González
P.D. Este artículo se publicó en 2024 en la revista Getsemaní Gloria, nº 11, pp.42-47
NOTAS
1/ Esta imagen de San
Miguel presidía el ático del retablo cuando ocupaba la hornacina principal una
Inmaculada, también patrona de la Esclavitud, desaparecida hace algunos años.
Esa hornacina fue entonces para el arcángel, hasta que en fechas recientes la
ha ocupado la imagen de la Divina Pastora, trasladada a San Lorenzo debido al
lamentable y prolongado cierre de su cercano templo. San Miguel volvió por
tanto al ático. Es curioso, además de que las dos imágenes son de Montes de
Oca, que ahora el retablo de San Lorenzo presente la misma configuración que ha
tenido siempre el retablo mayor de la Divina Pastora, con la Virgen y San
Miguel. Y es que el arcángel también está muy relacionado con la iconografía pastoreña
ya que, desde los inicios de esta advocación, aparece como protector del rebaño.
2/ Hormigo
Sánchez,
Enrique y Sánchez Peña, José
Miguel (2007): Documentos para la Historia del Arte en Cádiz. Tomo I, Cádiz, p.162
3/ Archivo Histórico
de la Esclavitud Santísimo y Ánimas de Cádiz (AHESAC), Cabildos de la
Esclavitud y Ánimas (1723-1756) libro 22, ff. 50v-54v.
4/ Archivo Histórico
Provincial de Cádiz (AHPC), Protocolos Cádiz, prot. 2150, ff. 87-92. Donación
de capilla, ante Manuel de Mesa, escribano público.
5/ AHESAC, Libro de
Hermanos de la Esclavitud, 1734. Libro 19, f. 86.
6/ AHESAC, Cabildos
de la Esclavitud y Ánimas (1723-1756), libro 22.
7/ AHPC, Protocolos
Cádiz, prot.1467, ff. 586-592. Donación de sitio, ante el escribano público
Fernando de la Parra.
8/ AHESAC, Estatutos
y normas internas. Caja 20. Estatutos de la Venerable e Inmemorial Esclavitud
del Santísimo Sacramento y Archicofradía de las Benditas Ánimas (1920) Cádiz,
Tip. Ordoñez C. del Castillo, 7, p.20.
9/ AHESAC, Estatutos
y normas internas. Caja 20. Libro manuscrito con los Estatutos aprobados en
1882.
10/
Guía Oficial de Cádiz su provincia y departamento por Don José Rosetty (1883), Cádiz,
Imprenta de la Revista Médica de D. Federico Joly, p.150.
11/ AHESAC, Estatutos
y normas internas. Caja 20. Manuscrito con las Ordenanzas y Constituciones bajo
las cuales deben gobernarse las Hermandades unidas del Santísimo Sacramento y
las Benditas Ánimas. Año 1805. Capítulo 20.
12/ AHESAC, Libro de
misas (1738-1789: 1784) Caja 18.
13/ Como ejemplo de la
preocupación por la salvación de las almas, encontramos una muestra de lo que
se publicaba en Cádiz a finales del siglo XVIII; El Purgatorio abierto a la piedad de los vivientes o breve quotidiano
exercicio, en sufragio de las almas del purgatorio, Reimpreso en Cádiz, en
la Imprenta de Don Pedro Gómez de Requena, Impresor mayor por su Majestad:
Plazuela de las Tablas. Año de 1791.
14/
De la Pascua Sánchez, María José
(1984): Actitudes ante la muerte en el Cádiz de la primera mitad del siglo
XVIII. Diputación Provincial de Cádiz, p.194.
15/ Agüera
Ros,
José A. (2001): «Iconografía singular de San Eloy por los grabadores
setecentistas germanos Klauber» Estudios
de platería San Eloy. Universidad de Murcia, Servicio de Publicaciones, p.28
16/ Carrasco
Terriza,
Manuel Jesús (2008): «Un grabado de Klauber sobre el Padrenuestro» Boletín Oficial del Obispado de Huelva,
Año LV, nº 391, p. 75-88.
17/ Corvera
Poiré,
Marcela (2021): «Un apostolado grabado en Augsburgo por los hermanos Klauber y
otro pintado en Quito por Bernardo Rodríguez: diferencias entre la serie
americana y su modelo europeo» Revista
Montalbán, nº 58, pp. 129-171.